Casi el 80% de los pacientes de Medicare en diálisis fueron hospitalizados en los 30 días anteriores a su muerte; pasaron el doble de días en el hospital que los pacientes que mueren de cáncer.

Con la asistencia de Hospicio Toque de Amor, más personas tienen la opción de vivir y morir en la comodidad de su hogar. El hospicio ayuda a reducir la hospitalización, minimizar el dolor y los síntomas y mejorar la calidad de vida.

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El plan de cuidados paliativos para la enfermedad renal

El plan de cuidados paliativos para la insuficiencia renal terminal (IRT) aborda el bienestar físico y psicosocial del paciente y trata de controlar una amplia variedad de síntomas de la insuficiencia renal, entre los que se incluyen:

• Dolor

• Fatiga

• Pérdida de apetito

• Náuseas y vómitos

• Picor

• Dificultad para respirar

• Dificultad para dormir

• Ansiedad

• Depresión

La retirada de la diálisis, o la decisión de renunciar a ella por completo, suele ser un proceso emocionalmente difícil. Los cuidados paliativos ofrecen apoyo emocional y espiritual a los pacientes y sus seres queridos.

 

Saber cuándo un paciente con ERT está preparado para recibir cuidados paliativos;

 

Cuando a un paciente se le diagnostica una enfermedad renal terminal, la pregunta que se hace el nefrólogo o el médico de cabecera es: "¿Cuál es el objetivo de los cuidados?". El objetivo es o bien proporcionar diálisis rehabilitadora para mantener o mejorar la función, o bien proporcionar cuidados paliativos.

Los pacientes con enfermedad renal terminal se caracterizan cada vez más por una edad avanzada y múltiples enfermedades comórbidas, y tienen una tasa de mortalidad ocho veces superior a la de la población general de Medicare. Los pacientes en diálisis son adecuados para recibir cuidados paliativos debido a su elevada tasa de mortalidad y a la gran carga sintomática.

Cada vez son más los pacientes y familiares que deciden no iniciar o retirar la diálisis por múltiples motivos, sobre todo en pacientes mayores de 60 años. Las voluntades anticipadas y las directivas de reanimación son importantes para garantizar unos cuidados paliativos compasivos y dirigidos a los objetivos de los pacientes con enfermedad renal terminal.1 Tomar estas decisiones suele ser un proceso emocionalmente difícil. Los cuidados paliativos ofrecen apoyo emocional y espiritual a los pacientes y a sus seres queridos.

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Indicadores comunes de enfermedad renal terminal:

 

• Uremia

• Confusión, obnubilación

• Náuseas y vómitos persistentes

• Prurito generalizado

• Inquietud, "piernas inquietas

• Oliguria: diuresis <400 cc/24 h

• Hiperpotasemia intratable: potasio sérico persistente >7,0

• Pericarditis urémica

• Síndrome hepatorrenal

• Sobrecarga de líquidos intratable

Otros indicadores y síntomas:

• El paciente rechaza la diálisis o la interrumpe

• 25%-30% de los pacientes en diálisis que declinan con otras enfermedades comórbidas, como cánceres, cardiopatía terminal, enfermedad pulmonar terminal

• Pérdida de peso

• Deterioro funcional

• Deterioro cognitivo

• Retraimiento social

• Dolor incontrolado

• Náuseas frecuentes

• Debilidad creciente

• Hipotensión ortostática

• Deshidratación

• Disminución de la masa muscular

• Deterioro de la función inmunitaria

• Aumento de las infecciones

• Disminución de la respuesta simpática a los factores estresantes

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Resultados de laboratorio:

 

• Depuración de creatina <10 cc/min (<15 cc/min para diabéticos) y,

• Creatina sérica >8,0 mg/dL (>6,0 mg/dL para diabéticos)

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CMS Medicare proporciona estas directrices como una herramienta práctica. No sustituyen el juicio profesional del médico.​

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